Vamos a hablar de la Universidad de Otoño, actividad que organiza el Colegio Oficial del que usted es decano. Y dado que esta actividad se enmarca en el ámbito de la formación permanente del profesorado, ¿cuál es su opinión sobre esta formación?
La formación del profesorado no es simplemente una tarea técnica; es una verdadera obra de arte y “un proceso vitalicio”. Con frecuencia decimos que “La educación no se asemeja a llenar un cubo, sino a prender fuego”. Consecuentemente, nuestra misión como educadores es inspirar, motivar y cultivar la curiosidad y el amor por el conocimiento en nuestros estudiantes. Y la Universidad de Otoño es una oportunidad para prender ese fuego en nosotros mismos, para renovar nuestras propias pasiones y habilidades. Concluyendo: estamos convencidos de que la formación continua es una inversión en nuestro futuro y en el futuro de nuestros estudiantes. La formación permanente nos permite no solo adaptarnos y permanecer actualizados, sino también innovar y liderar.
Nuestros actividades y cursos, cuidadosamente diseñados por expertos en cada materia, abordan temas de relevancia actual y futura para la práctica docente, desde estrategias para un nuevo contexto escolar, hasta la integración de la inteligencia artificial generativa y de nuevas herramientas informáticas en el aula. Pretendemos así, en la Universidad de Otoño, reflejar nuestra firme convicción de que la educación es el motor del progreso y del cambio social.
¿Podría concretarme un poco más qué ha querido decir cuando afirma que la formación del profesorado es “un proceso vitalicio”?
En un entorno educativo en constante transformación, la formación continua adquiere una relevancia aún mayor. Por ejemplo, la reciente pandemia mundial ha acelerado cambios profundos en la manera en que enseñamos y aprendemos. Como educadores, debemos estar preparados para afrontar estos desafíos con serenidad y creatividad. En este contexto, la Universidad de Otoño se presenta como una luz de esperanza y oportunidad en medio de la incertidumbre, ofreciendo herramientas y estrategias para navegar en el desapacible océano de la educación contemporánea.
- ¿Podría hablarnos de la importancia de la Universidad de Otoño y de las novedades de este año?
- La importancia de la Universidad de Otoño radica en su capacidad para reunir a destacadas figuras de los ámbitos académico y científico, y a autoridades de los más altos estamentos de la Administración, así como a expertos en diversas disciplinas educativas. Es un espacio de encuentro en el que el diálogo y el intercambio de ideas fluyen libremente, enriqueciendo nuestra práctica docente y fortaleciendo nuestra experiencia profesional. Quiero, pues, insistir en esta idea: la Universidad de Otoño no solo es un lugar para adquirir conocimientos, sino también para tejer redes de colaboración y camaradería entre colegas. Es un espacio donde los lazos profesionales se fortalecen y donde la comunidad educativa se une en pos de un objetivo común: la mejora continua de nuestra capacitación docente y de la calidad educativa.
En este 2024, celebramos 43 años de historia de nuestra Universidad de Otoño; 43 años de crecimiento, de evolución y de adaptación a los desafíos cambiantes del panorama educativo. Este evento nos brinda, cada año, la oportunidad de reflexionar sobre la situación de la educación en España, en cada momento, y de trazar un camino hacia un futuro más prometedor. Y siempre incluye una conferencia general para los asistentes a los diferentes cursos programados.
- Entiendo que, para programar la formación, cada año se parte de un contexto educativo diferente. ¿Qué valoración hace el Colegio que preside del momento actual?
- No es fácil simplificar una valoración tan amplia como es el hecho educativo, tan lleno de teorías, planteamientos y matices; pero puedo centrarme en las preocupaciones, interrogantes y prioridades que destacaría este año a la hora de reflexionar sobre la educación en España. En este sentido, las palabras de nuestro secretario general, Luis Enrique Íñigo Fernández, recientemente publicadas en El Debate (15/07/2024), podrían ser, en gran parte, la base sobre la que se ha cimentado nuestra programación; y, en este sentido, le apunto lo siguiente:
- El irrenunciable objetivo de atender a las necesidades educativas de los alumnos con dificultades se ha confundido con el olvido de la excelencia y el abandono del esfuerzo y la constancia, únicas recetas que aseguran el éxito en la escuela y en la vida.
- La clave del éxito de un sistema educativo no reside en mejorar la factura de los planes de estudio ni en incrementar el número de horas que los docentes pasan programando y evaluando a los alumnos; tampoco en enseñarles sólo medios de
acceder al conocimiento en lugar del conocimiento mismo.
- ¿De qué sirve adiestrar a los alumnos en la búsqueda de información, si no poseen la estructura mental que les permita luego integrarla y darle sentido?
- No se necesitan grandes innovaciones, sino tan solo maestros cualificados, bien pagados y conscientes de su compromiso con la actualización en proyectos y métodos.
- Es necesario contar con ratios reducidas, que permitan atender “de verdad” a la diversidad, acercando a los alumnos al máximo nivel que puedan alcanzar, y no a la inversa.
- La tarea educativa es un proceso en el que intervienen muchos actores. ¿Cómo se sitúa la Universidad de Otoño en el seno de la amplia comunidad educativa?
- La Universidad de Otoño es un espacio donde los lazos profesionales se fortalecen y donde la comunidad educativa se une en pos de un objetivo común: la mejora continua de nuestra capacitación docente y de la calidad educativa. Representa, desde hace años, un espacio destacado en nuestro aprendizaje continuo. Un espacio donde cada uno de nosotros es un estudiante y a la vez un maestro.
En esta próxima edición, la XLIII, marcada por la continuidad de una tradición arraigada y el compromiso con la innovación constante, nos reuniremos una vez más para celebrar el valor de la educación continua y el intercambio de conocimientos que tanto enriquecen nuestra labor como educadores.
Conviene recordar aquí que desde su primera edición, la Universidad de Otoño ha sido un ámbito de excelencia y un punto de encuentro para la comunidad educativa. Es más que una serie de cursos y conferencias; es un espacio donde convergen la experiencia, la reflexión y la exploración de nuevas fronteras pedagógicas. Y en este año, al conmemorar nuestra cuadragésima tercera edición, recordamos con orgullo y gratitud a todos aquellos que han contribuido a hacer de este evento un referente en el ámbito educativo.
Aunque, cuarenta y tres ediciones dan para mucho, si echa la vista hacia atrás, ¿qué destacaría?
En la Universidad de Otoño hemos sido testigo de excepción de la evolución de la enseñanza a lo largo de las décadas, adaptándose a los cambios sociales, tecnológicos y pedagógicos. En cada edición, hemos abordado temas relevantes y desafíos emergentes, desde la comunicación lingüística como competencia transversal hasta la tutorización de cursos en línea y la gestión de entornos virtuales de aprendizaje.
La Universidad de Otoño ha sido, y es actualmente, foro abierto a las diferentes políticas, teorías y tendencias en educación, y ha dado voz a planteamientos muy diversos para generar un debate libre entre educadores de todas las áreas temáticas y de muy diversas tendencias. La Universidad de Otoño se erige, por tanto, como un espacio privilegiado para este proceso de formación y transformación.
Concretando un poco más, ¿qué temática han seleccionado para la edición de este año?
Nuestro lema de este año es “La información no es conocimiento. ¡Fórmate!”; una llamada a la reflexión sobre la importancia de no quedarnos simplemente con la acumulación de datos, sino de transformar esa información en conocimiento significativo y aplicable en nuestra labor como educadores. En un mundo saturado de información, es crucial desarrollar habilidades críticas y analíticas que nos permitan discernir entre lo relevante y lo superfluo, entre lo sustancial y lo accesorio.
Además de la conferencia general, que en esta edición se centra en un tema transversal, y que lleva por título “Proteger el deseo de aprender”, este año nuestra oferta formativa abarca una amplia gama de áreas temáticas, todas ellas diseñadas para satisfacer las necesidades actuales y futuras de nuestros docentes y educadores. En concreto, el programa contiene las áreas temáticas y contenidos siguientes, que se pueden ver ampliados en los correspondientes enlaces:
- En Historia, abordamos la evolución de los derechos y roles de las mujeres en España, destacando la importancia de la educación en la construcción social y cultural del género.
https://cdlmadrid.org/las-mujeres-y-el-feminismo-en-la-espana-de-los-siglos-xx-xxi-contenidos-y-recursos-para-el-aula/
- En Lengua castellana y Literatura, insistiremos en la competencia lingüística, mejorándola mediante el desarrollo de habilidades lingüísticas robustas. Este curso proporcionará herramientas esenciales para la comunicación efectiva y la comprensión intercultural.
https://cdlmadrid.org/mejorando-la-competencia-linguistica/
- Estudiaremos también la historia y la literatura clásica para conectar a los estudiantes con las raíces de la civilización occidental y reflexionar sobre su relevancia en el mundo contemporáneo.
https://cdlmadrid.org/ilion-algo-mas-que-una-ciudad-antigua/
- Didáctica de la Religión ofrecerá estrategias para integrar la música en la enseñanza de la Religión, facilitando una comprensión más profunda y emocional de los contenidos.
https://cdlmadrid.org/musica-y-religion-recursos-para-la-clase-de-religion/
- Desde el seminario de Lengua inglesa, se profundizará en “los ingredientes esenciales para una clase saludable”. Focalizado en el bienestar emocional, se aborda la adquisición de estrategias para crear un entorno positivo y productivo en las clases de inglés, motivando a los estudiantes a alcanzar su máximo potencial.
https://cdlmadrid.org/essential-ingredients-for-a-healthy-class/
Las actuaciones del ámbito interdisciplinar abordan:
- El marco actual del sistema educativo en Educación Infantil y Educación Primaria, curso en el que se analizarán las últimas reformas y tendencias en Educación Infantil y Primaria, adaptando las prácticas a las necesidades cambiantes de los estudiantes.
https://cdlmadrid.org/el-marco-actual-del-sistema-educativo-en-educacion-infantil-y-educacion-primaria/
- El centro educativo: organización, valores, creatividad y pensamiento crítico, considerando la gestión integral del centro educativo, promoviendo un entorno de aprendizaje dinámico que fomente la creatividad y el pensamiento crítico.
https://cdlmadrid.org/el-centro-educativo-organizacion-valores-creatividad-y-pensamiento-critico/
Como es obvio, también, resaltaremos en todos los cursos la importancia de la formación continua como herramienta para el cambio positivo en nuestras comunidades educativas.
Muchas gracias por sus respuestas. ¿Le gustaría añadir algo más?
Muchas gracias a vosotros por abrirme un hueco en este espacio literario tan privilegiado. Para finalizar, quisiera dirigirme al profesorado para desearles un excelente curso escolar e invitarles a unirse a nosotros en esta nueva edición de la Universidad de Otoño. Es una oportunidad única para renovar nuestro compromiso con la excelencia educativa, para explorar nuevas perspectivas y para fortalecer nuestra práctica profesional.
Y permítame, para concluir, que me dirija directamente al profesorado: no importa si eres un educador experimentado o recién llegado al mundo de la enseñanza. En la Universidad de Otoño, hay un espacio para ti.
Programa general.
https://cdlmadrid.org/abierto-el-plazo-de-matricula-para-la-universidad-de-otono-2024/
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