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Iñaki Ezkerra
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Iñaki Ezkerra (Foto: Javier Velasco Oliaga)

Publicamos en exclusiva cuatro sonetos de los "Cien sonetos de la vida entera. Antología", de Iñaki Ezkerra

domingo 04 de junio de 2023, 23:01h
El escritor y poeta bilbaíno Iñaki Ezkerra acaba de publicar el poemario "Cien sonetos de la vida entera. Antología" en la editorial Huerga & Fierro. Nos ha cedido cuatro de ellos para que los publiquemos.
Cien sonetos de la vida entera. Antología
Cien sonetos de la vida entera. Antología
RECONVERSIÓN DE DAFNE EN VESPA

A Dafne ya los brazos le decrecen
y en manillar se metamorfosean
al tiempo que también se redondean
sus piernas y a dos ruedas se parecen.

A sus espaldas dos sillines crecen,
mientras en guardabarros se moldean
sus nalgas. Y sus gafas ya recrean
un parabrisas que las curvas mecen.

La realidad coincide con el sueño
y el mito en que el objeto del deseo
le deja una vez más al hombre solo.

La ninfa es ya una Vespa que su dueño
dejó para el desguace o el saqueo
y hoy rueda conducida por Apolo.


LA AMADA EN PIJAMA

Me gustas enfermita y en pijama,
esos días aciagos que uno tiene
que dedicar a hacerte tés y viene
y va de la cocina a nuestra cama.

Llevarte algo de leche, una amplia gama
de zumos o infusiones y que suene
nuestro contestador y que se llene
de mensajes, pasar de quien nos llama.

Llevarte algún jarabe, alguna odiosa
pastilla que te saque de la cara
esa mueca entre horrible y deliciosa.

Acariciarte el pelo, darte agüita,
purés, yogures, flan, con la cuchara.
Llamarte muchas veces «pobrecita».


TUS LABIOS COMO TUS ALAS

Conozco tu silencio, lo que calla
tu boca cada vez que un pensamiento
se queda en las orillas de tu aliento
como una ola en la orilla de una playa.

Porque tus labios vuelan de esa valla
de sombra hacia la luz, al día, al viento,
al cielo, al mar, al sol, al firmamento
si el beso es una bomba que no estalla.

Como alas tuyas en los más sombríos
instantes de mi vida, ellos me anuncian
la hora en que mi nombre han pronunciado

de un modo que los hace labios míos.
Y como en ese nombre que pronuncian
yo vuelo entre tus labios replegado.


JIMENA Y EL HIBISCO

Jimena en una tarde muy azulada
sobre el jardín, botánica, acercándose
lentamente a un hibisco, enamorándose
de su aroma y su piel anaranjada.

Jimena devorándolo extasiada
mientras la tarde va jimenizándose
y va ya cada pétalo inmolándose
en jimenización acelerada.

Jimena hibisquizándose en la tarde,
jimenizando ya el color naranja
mientras se desazula la gran franja

horizontal del mar; mientras el mar de
El Puerto, el sol, la tarde que agoniza,
todo lo que es azul se jimeniza.

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