En las postrimerías de la Guerra Civil americana, los hermanos Prentiss y Landry, afroamericanos recién liberados por la Proclamación de Emancipación, buscan refugio en la propiedad del granjero blanco George Walker y su esposa, Isabelle. Los Walker, atormentados por el fallecimiento en la guerra de su único hijo, contratan a los hermanos para que trabajen en sus tierras, con la esperanza de que esa amistad inesperada los ayude a sanar. Prentiss y Landry, por su parte, planean ahorrar dinero para viajar al norte y buscar la manera de reunirse con su madre, a la que vendieron cuando ellos eran niños. En paralelo a esta historia transcurre un romance prohibido entre dos soldados confederados. Los jóvenes, recién regresados a Old Ox después de la guerra, celebran sus encuentros amorosos en el bosque, pero cuando su secreto sale a la luz, el caos que resulta provoca repercusiones que desestabilizan toda la comunidad.
Con sinceridad y empatía, el debutante Nathan Harris crea un reparto inolvidable de personajes y nos presenta los entresijos sociales del estado de Georgia durante la época violenta de la Reconstrucción. Considerado por muchos como la joven promesa de la literatura estadounidense, Harris es la nueva sensación en los círculos literarios americanos y ha conquistado con La dulzura del agua las bibliotecas de figuras como Oprah Winfrey y Barack Obama, quien lo incluyó en su lista de mejores libros del año 2021.
Su narrativa se caracteriza por abordar, a través de una perspectiva histórica no exenta de lirismo, cuestiones identitarias de rabiosa actualidad para la sociedad actual, como la opresión racial o la identidad sexual y de género. Con esta opera prima, recién editada en España por ADN, el joven autor conecta profundamente con las inquietudes y anhelos de toda una generación necesitada de nuevos modelos narrativos que aborden la compleja problemática social del siglo XXI, sin perjuicio de que esos temas actuales se exploren a través del prisma de la novela histórica.
En La dulzura del agua, Harris crea un equilibrio entre los detalles íntimos de los personajes e ideas más amplias sobre el legado de la esclavitud en EE.UU. o lo que supone la búsqueda de la libertad plena. Según el propio autor, los capítulos que nos sumergen en la piel de los exesclavos Prentiss y Landry “son las partes más impactantes y tienen un vínculo urgente con la época que vivimos, pero fueron duras de componer” por el impacto psicológico que supuso recrear los traumas y secuelas que sufren estos personajes. A nivel histórico, la obra explora aspectos como la manera en la que la resistencia blanca minó la Reconstrucción y cómo los norteños terminaron cediendo ante los objetivos segregacionistas y supremacistas de los sureños blancos.
Su maestría narrativa le valió el año pasado a Harris un puesto de finalista al Premio Booker, uno de los galardones literarios más prestigiosos del mundo en lengua inglesa, mientras que ha sido reconocido con otros importantes premios como el Ernest J. Gaines Award for Literary Excellence y el Willie Morris Award for Southern Fiction.
Nathan Harris tiene un máster en Bellas Artes del Centro Michener, Universidad de Texas. Recibió el Premio Kidd de la Universidad de Oregón y fue finalista del Premio de ficción Tennessee Williams. Vive en Austin, Texas. La dulzura del agua es su primera novela, con la que ha sido finalista del Premio Booker 2021 y ha conseguido importantes galardones, como el Ernest J. Gaines Award for Literary Excellence y el Willie Morris Award for Southern Fiction.
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