La lucha de una mujer en plenitud por vencer a una enfermedad crónica, en “Doctor, no voy a rendirme”

«Antes de que empezara todo, y con todo me refiero a quedarme un día inmóvil en la cama porque el dolor no me permitía salir de ella, mi vida era feliz. Yo vivía en Suecia –el país que me acogió con poquitos meses–, y tenía un excelente empleo muy bien pagado en la multinacional tecnológica Ericsson, una empresa muy sueca, que cuidaba a sus trabajadores. Desempeñé varios cargos de responsabilidad en el departamento de Marketing y Comunicación y, con 29 años, mi carrera profesional iba sobre ruedas y me proporcionaba la posibilidad de viajar mucho».

La periodista y escritora Ana Basanta nos narra, en Doctor, no voy a rendirme. Cómo me hice amiga de mi enfermedad crónica (Editorial Diëresis), la historia de Patricia Pólvora, un ejemplo de superación. Tras ser informada de su previsible destino, Patricia decidió que no iba a permitir que su enfermedad le robara sus sueños y sus objetivos: no iba a quedarse resignada esperando a acabar en una silla de ruedas. Se iba a enfrentar a la enfermedad, aunque ello le supusiera, además de otros muchos esfuerzos, cambiar de país y dejar un buen trabajo.

El libro es el resultado de más de un año de entrevistas entre la autora, Ana Basanta, y la protagonista, Patricia Pólvora. En ellas, la protagonista ha explicado su trayectoria vital, desde su infancia como refugiada uruguaya en la Suecia de los años 80, hasta el momento en que le diagnosticaron artritis reumatoide de por vida, y cómo ha sido su convivencia con la enfermedad desde entonces.

El objetivo de ambas con este libro es muy claro: “Si pudiéramos ayudar ni que fuera a una persona a sobrellevar una situación tan difícil como ésta, habrá valido la pena”. Y si, en vez de una, fueran muchas, tanto enfermos como cuidadores, familiares y amigos; si se pudiera dar a conocer un poquito más el dolor que causa la artritis reumatoide, la recompensa sería aún mayor.

El libro está estructurado en doce capítulos que, sin seguir necesariamente un estricto orden cronológico, muestran las diferentes etapas de la vida de Patricia. La narración arranca con el momento en que su situación da un enorme vuelco al serle diagnosticada la enfermedad crónica, acompañada de los augurios más pesimistas. Los tres primeros capítulos se centran en ese momento: el diagnóstico, la asunción del mismo, sus consecuencias para la protagonista y la adaptación a su nueva situación.

En el cuarto capítulo, la autora, que narra en primera persona asumiendo el rol de la protagonista, nos explica la decisión fundamental que ésta toma, motivada por la enfermedad: Patricia decide dejar la fría Suecia y establecerse en una ciudad con un clima más cálido y menos propenso a estimular una enfermedad como la que padece. Su elección es Barcelona.

Nos adentramos en la lectura para, a continuación, buscar el origen del espíritu de lucha y superación de la protagonista: su infancia está marcada por la huida con su familia de los golpes de estado de Uruguay y Argentina, en los años 70, y por su condición de refugiada en Suecia.

A partir de ahí, la autora –en su rol de protagonista– nos explica cómo Patricia ha peleado, literalmente, porque su enfermedad y los inmensos dolores que le ocasiona constantemente, no le impidan llevar una vida como la de otras personas que no la padecen. Para ello, ha tenido –y sigue teniendo– que sacar fuerzas de lo más hondo de sí misma constantemente.

El libro se detiene en el relato de la vida sentimental de la protagonista y en cómo una enfermedad crónica no tiene por qué limitar tus relaciones. El amor de Patricia fructificará, contra todos los diagnósticos, con el esperado hijo que le había sido vetado. Durante el embarazo, además, la enfermedad le ofrece una tregua, al utilizar su cuerpo el sistema inmunitario del feto. «Con el embarazo, supe lo que es no tener dolor y quería aprovechar cada segundo. Recuerdo un día en que, estando en una parada de autobús, me puse a mover las manos, como si bailara flamenco solo para sentir lo que era hacerlo. Nadie más allí veía mis movimientos ni se podía imaginar la felicidad y el éxtasis que me causaba». Prescindir de los fármacos tuvo consecuencias: durante el embarazo, los huesos de pies y manos se deformaron, hasta el punto de que su deterioro cambia la forma de mover las extremidades.

Su embarazo coincide con el momento en que está creando Teterum, su propio negocio de venta de té online, después de haber decidido también convertirse en emprendedora. La energía y la enorme fuerza de voluntad pueden más que el desánimo. Para ello, previamente había dejado un empleo estable y bien pagado. Teterum es una firma de tés con valor social que, además de tener en cuenta al máximo la calidad y el cuidado al medio ambiente, trabaja con personas de centros ocupacionales con síndrome de Down, autismo y esclerosis múltiple.

Ante todo, Patricia ha aprendido a disfrutar los buenos momentos y los pequeños éxitos: los días con menos problemas de movilidad, las épocas sin brotes de la enfermedad, las risas en una cafetería, las mejoras en la rehabilitación, el sol en la cara, el olor del té y todos aquellos instantes que la hacen feliz. «Allí supe que mi vida me había enseñado, a base de muchos golpes contra muros, que la felicidad puede estar allí, siempre y cuando tú también estés allí y no pensando en lo que podía haber sido, o lo que será, o lo que fue».

La artritis reumatoide

Cinco de cada 1.000 personas padecen artritis reumatoide en el mundo. En España, unas 240.000 mujeres y hombres están afectados por ella. Se trata de una enfermedad inflamatoria que afecta a las articulaciones y que puede causar importantes limitaciones físicas y un deterioro de la calidad de vida, tal como explica la Coordinadora Nacional de Artritis (ConArtritis).

La protagonista: Patricia Pólvora

Nació en Buenos Aires (Argentina) en 1976, cuatro días después del golpe de estado. De pequeña se trasladó con su familia a Suecia, donde vivió casi treinta años. Allí trabajó en la multinacional Ericsson durante trece. En 2005 vino a Barcelona, motivada por el clima cálido de la ciudad, con el convencimiento de que le podría ayudar a suavizar su enfermedad crónica. También decidió fundar la empresa Teterum, con la idea de potenciar el don de las personas que trabajan el té desde centros ocupacionales, creando de esta manera la única marca de té de impacto social en España para demostrar que la discapacidad no define a una persona, sino que la hace única. Es una de las protagonistas del libro Decididos. Diez experiencias de vida fuera de un entorno competitivo (Diëresis, 2016) y, a raíz de la narración en él de su historia de cambio, surgió esta nueva obra sobre su vida con la artritis reumatoide.

La autora: Ana Basanta

Nació en Barcelona en 1975. Licenciada en Historia y en Periodismo, trabaja en el diario digital Catalunyapress y colabora con diferentes medios de comunicación. Ha publicado la novela Días que valieron la pena (2017), el ensayo Decididos. Diez experiencias de vida fuera de un entorno competitivo (2016); los libros de viajes Halcón de los Andes (2010) y Líbano desconocido (2012) y es coautora de Inconformistes. Cròniques socials a la Barcelona de la crisi (2013). Ha ganado, entre otros, el concurso de narraciones cortas Vita Brevis y el Certamen de Cartas de Desamor; ha obtenido el segundo premio en El Pilar de Vuit, y ha sido finalista en los certámenes Lletres al Comerç, La Factoría, Mujeres Viajeras y El Laurel.

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