El otro 50 por ciento en el mundo editorial: las editoriales independientes

Beatriz Rubio Fernández, editora de Distinta Tinta Ediciones afirma: “hay una diferenciación entre editoriales independientes pequeñas y microeditoriales. Un ejemplo: Nórdica y Errata son editoriales independientes pero son grandes editoriales, sin embargo, Distinta Tinta, Carmot, Sr. Scott, Báltica, son microeditoriales independientes y emergentes”.

“El, problema del mundo editorial independiente es que, al menos en su mayor parte, no es independiente. Para mí la independencia, y esto vale para editoriales, librerías y distribuidoras, está en publicar un libro por sus cualidades literarias sin valorar su viabilidad comercial. No digo que sea fácil ni señalo el camino a seguir, pero la independencia está ahí, en recomendar ese libro a los lectores o en defenderlo frente a los libreros. No somos independientes por ser pequeños sino por huir de las modas y tendencias, por leer lo que publicamos, por defender un catálogo del primer al último libro sin mirar constantemente la fecha de publicación. El mundo editorial actual está esclavizado por las novedades.” comenta Jorge Salvador Galindo, de la Editorial Pez de Plata.

“Existen asociaciones y me parece que son de gran utilidad. Es bueno que nos apoyemos, al margen de estar asociado. No dudamos en pedir consejo o debatir con los colegas cualquier cuestión que nos ocupe. Compartimos y aprendemos todo el tiempo”, comenta Jon Botas de Trampa Ediciones.

Algunas de estas editoriales nacieron como otro negocio y ampliaron sus horizontes, como Mont Ventoux. Nacho Ruiz, su director, cuenta como nació la editorial “Originalmente éramos un sello de grabación. Llevamos un par de años en ello, somos unos neófitos todavía. Queremos aprender y trasladar la experiencia de la música a la literatura”.

Otras, parten de la necesidad de aportar un granito de arena comenta Victoria Borrás: “Nuestro objetivo es facilitar un espacio de lucha política desde lo subalterno y, desde aquí, generar una cultura que sea diversa y que nos represente a todas. El proceso de distribución es muy complicado. Se trata de un mercado que está copado por las grandes corporaciones del sector editorial (Penguin Random House y Planeta), de manera que el posicionamiento, es complicado.

Darío Ochoa, director editorial, de Automática Editorial “publica principalmente ficción extranjera. La mayor parte de nuestros títulos, alrededor de un 60%, se centran en la tradición eslava, especialmente la rusa “

En los últimos años han surgido muchas librerías en toda España que apuestan firme por los catálogos de las editoriales más pequeñas. Jorge Salvador Galindo, responsable de la Editorial Pez de Plata, comenta “ese apoyo se hace notar. Nuestro trabajo como editores, en cualquier caso, debe ser constante porque cada semana llegan a las librerías más novedades de las que el mercado puede digerir. Publicamos demasiado. Si publicáramos menos, inevitablemente publicaríamos mejor. Respiraríamos mejor e incluso leeríamos más y mejor.”

Muchos compatibilizan su trabajo al frente de la editorial con otro, como Beatriz, de Distinta Tinta Ediciones, “Por el momento tengo otro trabajo porque puedo compaginar los dos, y me gustan ambos. Jorge Salvador Galindo, de la Editorial Pez de Plata, “Sí, no me queda otra. Trabajo como lector, redactor y corrector para otras editoriales.

A la hora de elegir que publicar un texto cada editorial tiene su forma de buscar a sus escritores comenta, Beatriz Rubio Fernández, editora de Distinta Tinta Ediciones.

Ochoa, director editorial, de la editorial Automática: “En realidad, nuestro criterio de selección es muy sencillo, precisamente por eso, puede resultar vago. Desde que arrancamos el proyecto de Automática, hemos publicado solo aquellas obras que, de alguna manera, nos han conmovido, bien porque arrojan una luz nueva sobre realidades ya conocidas, o porque se asoman a otras desconocidas. Esto responde, en cierta manera, a una forma de entender la literatura como un arte que va más allá del entretenimiento y abre vías legítimas para el conocimiento de la historia, de la sociedad, del alma humana...“

“Muchas veces me encuentran, leo revistas, páginas web, hasta que un título o una autora me atrae y comienzo a leer. Busco principalmente autoras o protagonistas distintas, con relatos emocionantes.”, comenta Beatriz Rubio Fernández, editora de Distinta Tinta Ediciones.

Cada año se abren nuevas posibilidades al margen de las grandes y pequeñas ferias del libro tradicionales: iniciativas originales como Efímera o la Fantabulosa Feria del Libro Itinerante, festivales literarios, encuentros… Para Ruiz, director de Mont Ventoux., son pocas “Hay, pero siempre viene bien que haya más”.

Para Laura Huerga, responsable de la Editorial Rayo Verde, "el 15M y la necesidad de cambio, me dio la idea de crear un proyecto transformador, activista, reivindicativo a través de la literatura y el ensayo. Nuestro proyecto ha ido creciendo en los últimos años y se había consolidado en un cierto mínimo número de ventas, lectores que nos siguen o que nos son fieles porque confían en el proyecto. Ahora ya no sé qué decirte, la incertidumbre se cierne sobre nosotros, los editores, porque toda la cadena del libro está comprometida. Y la diversidad y riqueza que se estaba consiguiendo con las nuevas editoriales que surgían cada año también está en peligro. Espero que todas podamos aguantar", señala.