Ricardo Martínez-Conde: “En el aforismo el lector pasa a ser el protagonista, el que piensa”

Dedicarse a un género tan minoritario no deja de ser una valentía por parte del autor, ya que muchas personas no se van a acercar a su obra. Sin embargo, más allá de los Pirineos, el aforismo tiene mucha importancia literaria e intelectual. Debe ser que por allí, la facultad de pensar sigue estando de moda, algo que en nuestra piel de toro echamos de menos.

¿Cuántos libros de aforismos ha publicado?

"Por el camino” hace el número cuatro de mis libros de Aforismos.

El aforismo es un discurso abierto donde observación e inteligencia, reflexión e intuición, descripción e imaginación pueden ir unidos

¿Qué es un aforismo? ¿Cómo lo definiría desde su vertiente de poeta?

El Aforismo, que alguien ha querido definir como “un ejercicio de reflexión, a veces aparentemente vago, pero del todo absorbente” es un ejercicio de lectura implicador en el mejor sentido.  Y ello porque el lector pasa a ser el protagonista, el que piensa, extendiendo su voluntad –lo que implica la participación en la curiosidad y la duda, los fundamentos de la esencia aforística- hacia el pensamiento; es, pues, un ejercicio de libre inteligencia. Para mí constituye un decir y a la vez un sugerir, una definición abierta a distintas matizaciones, una invitación a que el lector perspicaz complete un significado siempre parcial. Es, podríamos decir, un discurso abierto donde observación e inteligencia, reflexión e intuición, descripción e imaginación pueden ir unidos por cuanto como tal género se nutre de diversas ramas del saber: de la historia, del arte, de la filosofía… Y siempre –es pertinente resaltarlo- a ser posible vinculado al sentido del humor, una forma muy oportuna de entender la realidad

¿El aforismo es un género popular o minoritario en España?

No se podría afirmar que se trata de un género popular. Y tal consideración debería servir para afinar en sus límites: no es una ocurrencia, o una frívola brevería; eso deformaría su verdadero valor.

“El aforismo es una flor pequeña, de una rara cualidad y hermosura”

¿Por qué el aforismo un género esencialmente breve?

Tal como ha sido explicitado por diversos autores, es como una flor pequeña, de una rara cualidad y hermosura, cuyo secreto le viene de poseer una raíz profunda alimentada en rigor descriptivo, en reflexión, en percepción poética; habría que pensar que Lichtenberg, o Nietzsche o Canetti iban por ahí Al modo de un viaje imaginario.

¿Lo bueno si breve, dos veces bueno?

El aforismo equivaldría a un viaje por completar, pero siempre en camino: con espíritu de futuro, bajo la premisa de la libertad, de la curiosidad…

En los próximos meses se proclamará al ganador del Premio “Torino in Sintesi”, único dedicado al aforismo en el mundo y al que ha sido invitado a participar. ¿Supone para usted un reconocimiento dicha invitación?

Toda invitación ajena, viniendo además de uno de los países con mayor calidad en su literatura aforística, es, sin duda, muy gratificante. Un honor.

¿Va asistir a las jornadas que se llevaran a cabo en la próxima primavera?

Mi intención, en principio, si bien no soy dado a participar en concursos abiertos o algún tipo de desafío inter-pares aforísticos, es acudir a la cita, aunque solo fuere por conocer a autores de otra cultura, algo que consideraré siempre enriquecedor.

¿Qué obras va a presentar y van a ser inéditas o ya publicadas?

En cuanto a mi participación como autor, he reunido aforismos ya conocidos o publicados, así como otros que están previstos como nuevos proyectos de publicación y, a modo de juego didáctico, algunos nuevos, recientes, con el marchamo de esa rara inmediatez que pudiera secundar también al género y que sirve para dar fe de lo cambiante de las realidades que hoy se nos ofrecen como una forma de cultura.                                

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