La acción ocurre en la Sevilla del siglo XVI
La novela surgió en enero de 2008, cuando Juan Gómez-Jurado se encontraba en Lituania con motivo de la Feria del Libro de este país, cuando una noche fría en la que las temperaturas llegaron a los -50ºC, visualizó el final de la novela como si de un flash se tratara. A los pocos segundos, ya estaba garabateando las sensaciones y las acciones que había percibido como unas monedas cayendo en el suelo de una iglesia, el entrechocar de las espadas, caballos galopando en una ciudad amurallada...
Pese a pensar en un principio que la novela que había planeado le venía un poco grande, se decidió a escribirla, proceso que le ha llevado cuatro años de duro trabajo, bastante tiempo en comparación con los 18 meses que suele dedicar normalmente a sus novelas. Para documentarse ha estado trabajando durante tres años, durante los que leyó 193 libros para conseguir ambientar la Sevilla del siglo XVI como si estuviéramos allí y convertirla en el gran personaje de fondo que es en esta novela.
De este modo, vemos una Sevilla sin cohesión social, sumida en la deshumanización, con grandes cantidades de gente sin trabajo y con el pueblo muriéndose de hambre, en parte por una mala gestión de los bienes y el desperdicio de los mismos. ¿Les suena? Como pueden comprobar, la historia se repite.
Para documentarse a la hora de caracterizar a los personajes, debido a la mayor complejidad, ha utilizado el método de Stanislavsky para meterse en sus cabezas. Incluso se compró un traje de la época que se ponía en ocasiones para escribir o compró doblones como los que se utilizaban en el siglo de oro.
El protagonista Sancho es un hombre que le han quitado todo
Hablando de personajes, hay que destacar que Sancho, el protagonista, es un hombre al que se lo han quitado todo y al que no le queda nada, pero que cree en sí mismo y en que no tiene que seguir el dictado de los poderosos y los corruptos, como son los principales antagonistas de la novela, un duque y un banquero. Por tanto, La leyenda del ladrón es una historia de optimismo y de superación personal.
El personaje femenino principal es Clara, la hija bastarda de una esclava de guerra también nacida esclava en Sevilla y a la que rodea la desgracia por todos lados. Clara entró a servir a la casa de un médico y ahí descubrió su verdadera vocación pese a que el arte y ciencia de la medicina le estuviese vedado por ser mujer, ya que era un monopolio exclusivo de cirujanos-barberos, religiosos y médicos y que provocaba la muerte en la hoguera de cualquier mujer que incumpliera este monopolio.
A su vez, hay que destacar la importante participación en la novela de Cervantes y Shakespeare, quienes van a actuar como figura paterna para Sancho y quienes están representados desde su lado humano y no como la leyenda en la que se convertirían más adelante. En el caso de Shakespeare, Juan utiliza los "años perdidos" del literato inglés en los que nadie sabía dónde estaba y hay teorías varias: desde la teoría de Iker Jiménez de que fue abducido por extraterrestres hasta de que pudo estar en Sevilla, ya que era el centro del mundo en esos momentos.
Para finalizar, me gustaría destacar un par de curiosidades. En primer lugar, todas las letras capituladas están tomadas de los manuscritos de Shakespeare, no de Cervantes porque no se conserva ningún manuscrito del grande de las letras español. Por otro lado, se ha desarrollado un aplicación para Android y Apple que permite detectar una serie de señales distribuidas por la novela que nos permiten el acceso a imágenes de la época o a monólogos del autor en los que cuenta una serie de explicaciones del ambiente o de la trama de la novela. De este modo, hay un mayor acercamiento al lector.
En definitiva, La leyenda del ladrón es la gran novela que ha permitido alcanzar a Juan Gómez-Jurado la fama que se merecía en España (ya que antes vendía más en Finlandia, por ejemplo) y que ha creado un mosaico del Siglo de Oro en el que increíbles vidas y aventuras dan lugar a una historia legendaria.
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