La mayor filtración de la historia.
Un personaje enigmático envuelto en un escándalo sexual.
Un militar acusado de alta traición.
La diplomacia mundial al descubierto.
Todos estos ingredientes conforman lo que ya se considera el mayor escándalo de los últimos tiempos. Y dos de sus principales protagonistas, los periodistas del Guardian David Leigh y Luke Harding, las primeras personas a quienes Julian Assange entregó los documentos secretos, nos cuentan los entresijos de la historia. El libro está escrito con estilo periodístico y es más una crónica detallada y trepidante de los acontecimientos, por todos conocidos como la mayor filtración de la historia, que un libro de reflexión, aunque hay momentos en que se intenta explicar por qué ocurrió dicho escándolo.
Pero, ¿quién es Assange? ¿Se trata de un mesías de la transparencia política o de un ciberterrorista al que hay que perseguir? Los autores nos revelan, con todo lujo de detalles, la vida de ese enigmático personaje, su infancia en Australia, sus primeras actividades en grupos de activistas hackers, el nacimiento de WikiLeaks y los presuntos delitos sexuales que cometió en Suecia, acontecimientos que describen con todo detalle.
Asimismo, el libro reconstruye la trama que permitió sacar a la luz los documentos. Desde la "conversión" del soldado Manning, a los primeros documentos secretos sobre Iraq y Afganistán, pasando por la persecución de la CIA a Julian Assange y las medidas éticas y legales que tomaron en el periódico una vez estuvieron en disposición de los documentos.
El resultado de todo ello es un relato trepidante sobre cómo se fraguó el mayor escándalo de los últimos tiempos que se convierte en una lectura compulsiva a la que uno no puede poner fin hasta la última página. Todo ello tiene como resultado un relato trepidante que sumergirá al lector en una lectura compulsiva hasta la última página. Se dice que va a ser el libro más interesante, objetivo y revelador de todos los que aparecerán en el 2011.
A pesar de todo esto, Assange se ha querido desmarcar de esta publicación denunciando por difamación a los dos periodistas del Guardian que han escrito el libro. El fundador de Wikileaks asegura que las declaraciones que ambos le atribuyen "son completamente falsas". En concreto el comentario, supuestamente hecho por Assange, en el que dice que si los informantes mencionados en los documentos sobre la guerra de Irak son asesinados, forma parte de su proceder y no debería sorprenderles.
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La verdadera historia, narrada por sus protagonistas, del escándalo que puso en jaque a la política mundial