Poco antes de Navidad, un anciano (único superviviente del naufragio de un barco de arrastre ocurrido hace cuarenta años) es hallado muerto en el mar. En una iglesia, una muchacha (único miembro de una familia que sobrevivió a una matanza durante el conflicto de Sierra Leona) es acuchillada con un machete. Un drogadicto (que logró huir de la casa en llamas donde murió su familia) es abrasado en un incendio en un barrio de viviendas de protección oficial.
El sargento McAvoy, un fornido policía de problemático pasado, y que es mirado con recelo por el resto de sus compañeros debido a su inquebrantable sentido del deber, será el único capaz de encontrar la conexión entre estos tres crímenes y el asesino de aterradores ojos azules que oculta su rostro tras un pasamontañas negro...
El oscuro invierno es el gran paso de un periodista de sucesos al género de la novela negra, de modo que todo lo que vemos reflejado en la trama se ajusta lo máximo posible a la realidad. El realismo es una de las palabras que definen a este libro, fundamentalmente en lo que concierne a las dependencias de la policía en las que trascurre una parte importante de la novela y en el propio personal de policía, del que nos da una visión muy precisa y acertada, sobre todo de las tensiones que sufren en su día a día o de cómo ninguno de ellos es un superhéroe y tiene los mismos problemas que podemos tener nosotros (y, por supuesto, las repercusiones que esto tiene en su trabajo).
De este modo, la descripción es un elemento fundamental en El oscuro invierno, ya que es la pieza de esta novela que más contribuye a dar una visión realista de la investigación, la forma de trabajar de la policía, los escenarios de los crímenes... a la vez que crea unos personajes verosímiles, como los que nos podemos encontrar en cualquier comisaría.
En cuanto al sargento McAvoy, personaje principal de la novela, ha sido definido por el autor como un hombre ajustado al modelo de la nueva masculinidad. Pese a que es un highlander escocés alto, fuerte, musculoso y un tío duro; en el fondo es alguien tímido, sensible y taimado cuyos compañeros siempre lo han mirado con un recelo porque piensan que su visión del deber es bastante dudable, aunque en realidad sólo sea un poco diferente a la suya.
En definitiva, El oscuro invierno es una excelente novela negra que nos envuelve en una trama múltiple pero precisa, brillante y enigmática para relatarnos el primer caso del sargento McAvoy, un caso lleno de misterio, incertidumbre y brutalidad que hará las delicias de los amantes del género.
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