Uno de esos acontecimientos fue el ajusticiamiento de Mariana de Pineda, una vergüenza más del rey Felón, que tenía todas las características de los reyes de la dinastía borbónica. José Calvo Poyato nos la recuerda en Mariana, los hilos de la libertad, una novela a medio camino entre la histórica y la negra. La trama policiaca que se desarrolla bien podría ser otra de las mejores novelas negras del año.
La segunda posición es para Circo Máximo, la nueva novela del escritor valenciano Santiago Posteguillo. Todas sus novelas son un dechado de erudición, de intriga y de pasión. Esta es la segunda entrega de su trilogía sobre Trajano, el famoso emperador romano nacido en Hispania. La tercera es para Tierra sin rey de Luis Zueco, una vibrante historia sobre Pedro II de Aragón y su pretensión de expandir la corona aragonesa allende los Pirineos. Ese sueño se truncó en la desconocida batalla de Muret. La historia no suele recordar a los perdedores.
Ildefonso Falconesno podía faltar a la cita, esta vez nos sorprende con La reina descalza, una novela que nos muestra cómo era la vida en la España del siglo XVIII y, también, en las posesiones del otro lado del Atlántico. Su novela más castiza ocupa la cuarta posición. A continuación se encuentra Dispara, yo ya estoy muerto, de la escritora madrileña Julia Navarro, que está empeñada en mostrarnos la historia más reciente, la del siglo pasado. Su novela, muy extensa como todas las suyas, tiene tantas tramas que, al final, nos resulta hasta corta, por supuesto que su novela tiene la garra que ya perdió hace tiempo Ken Follet, compañero de editorial.
En sexta posición se encuentra La serpiente sin ojos del escritor colombiano William Ospina. Con esta novela termina su trilogía sobre el descubridor español Pedro de Ursúa. Estas novelas no deberían faltar en ninguna buena biblioteca y nos extraña que no hayan tenido la difusión que se merecen. Sí la ha tenido, sin embargo, la tercera entrega de Banu Qasi, La hora del Califade Carlos Aurensanz que nos ha mostrado la historia de la Reconquista desde la perspectiva de la familia muladí.
En octava posición nos encontramos con Tiempo de cenizas del escritor catalán Jorge Molist. Esta nueva novela tiene todos los ingredientes de las buenas novelas de aventuras: hay emoción, intriga, violencia y, por supuesto, amor. Otra buena novela que posee muchas más virtudes de las que en un primer momento puede parecer. A continuación tenemos El cielo en un infierno cabe de Cristina López Barrio, que nos sorprende con una historia de amor llena de intriga, traiciones juicios y pecados, ambientada en la España de principios del siglos XVII donde la Inquisición campaba a sus anchas.
El décimo lugar es para la sorprendente Última Roma de León Arsenal, una impresionante recreación de los últimos tiempos de Roma. Con impresionante energía, el autor madrileño nos cuenta una época convulsa y poco conocida de nuestra historia.
Como ven ustedes, estas diez novelas merecen ser leídas con atención, pero hay muchas más novelas históricas que merecen la pena. En nuestro apartado sobre ellas encontrarán obras que les harán sumergirse en distintos periodos de nuestra historia.
Como siempre, el lector tiene razón, y si las novelas históricas están batiendo records de ventas será porque algo tienen y si no comparen qué libros venden más, ¿los de política o las novelas históricas? La verdad es que no hay color o sólo uno, el color de la historia.
Novela histórica
Síguenos en twitter: @Todoliteratura
Puedes comprar todos los libros mencionados en:
Si (
No(
