En La sanguijuela de mi niña, Christopher Moore vuelve a abordar la temática del amor entre vampiros. Jody despierta debajo de un contenedor en un callejón. Tiene un brazo quemado, le duele la espalda, siente una fuerza sobrehumana y una sed abrasadora y poco tiempo le lleva darse cuenta de que alguien ha decidido convertirla en vampiro, sin preguntarle primero su opinión. La joven Jody deberá enfrentarse entonces a los aspectos prácticos de su nueva condición, que pese a lo que podría creerse dista de ser puro romanticismo y poesía. ¿Dónde dormir? ¿Cómo mantener las apariencias ante su madre? ¿Cómo ingeniárselas para hacerse de sangre fresca? Todo es más difícil de lo que parece, especialmente cuando Jody no ha visto una sola película de vampiros en su vida. Pero las cosas cambian cuando en la vida de la chica aparece Thomas, un escritor frustrado que trabaja a tiempo parcial como dependiente.
La sanguijuela de mi niña es la precuela a su otra obra de temática de vampiros Chúpate esa, que ya fue publicada por la Factoría de Ideas. Vuelve a abordar el tema de los vampiros que se encuentra tan de moda estos días, especialmente por la saga de Crepúsculo, que ha vuelto locas a las adolescentes, principalmente. En lugar de una acción y una trama serias, Moore tratará la obra desde un punto de vista irónico en el que cada ocasión es buena para criticar el fantasioso mundo de los vampiros o la sociedad americana en general.
El punto de vista de mundo de los vampiros no es un mundo idílico ni lleno de aventuras como se da en la mayoría de las novelas que se fundamentas en esta clase de temática, sino que relata cómo sería la vida de un vampiro en la sociedad actual, considerando que debe alimentarse de sangre, por lo que se buscarán enfermos terminales para no soliviantas a la policía ni provocar alguna investigación; que no puede salir de día y necesitan a alguien que lo haga todo por ellos o que no pueden desarrollar sus facultades en un primer momento al no conocer a ningún vampiro ya que, lógicamente, no lo van pregonando por las calles.
Por tanto, la vida del vampiro (y la del siervo que debe hacer las tareas al vampiro) en una sociedad estresada y consumista no van a ser nada fáciles. Y a esto es a lo que Christopher Moore saca el máximo partido para provocarnos unas cuantas risas.
El autor de la novela, Christopher Moore, es un escritor norteamericano dedicado a la ficción absurda. Con títulos como El ángel más tonto del mundo, Un trabajo muy sucio, ¡Chúpate esa! o El bufón, Moore se ha transformado en un verdadero fenómeno internacional, arrasando en las listas de best sellers desde que se publicó su primera novela. Todas sus novelas han sido número 1 en las listas de los Estados Unidos y también la crítica ha recibido bien este fenómeno.
Críticas literarias
Puede comprar el libro en:
Si (
No(
