#Madres arrepentidas pone sobre la mesa algo de lo que apenas se habla: muchas mujeres, después de ser madres, no han encontrado la «profetizada» plenitud. Aman a sus hijos pero a su vez no quieren ser madres.
En su libro, Orna Donath examina el dictado social de la maternidad, de una manera similar a como se han examinado en el pasado las nociones de género o de orientación sexual. Analiza la dimensión del tabú dejando que sean las madres quienes hablen de sus experiencias (y que nadie lo haga por ellas).
Tras su minucioso e iluminador estudio plagado de testimonios, llega a la conclusión de que la maternidad es, bajo muchas formas, una construcción social. Así, Madres arrepentidas se erige como un nuevo e imprescindible manifiesto feminista llamado a romper barreras.
«Sin duda, soy realmente una madre fantástica, en serio, soy una buena madre. Me avergüenza decirlo, incluso. Soy una madre para la que sus hijos son importantes, los quiero, leo libros, busco consejo profesional, intento hacer lo posible por darles una educación mejor y mucho amor y cariño. […] Pero aun así odio ser madre. Lo odio. Odio este papel.», Sophia (madre de dos hijos de entre 1 y 5 años).
Todo empezó con un artículo publicado en primavera de 2015 en el Süddeutsche Zeitung y luego otro en el Die Zeit, dos de los periódicos alemanes más prestigiosos. Ahí entrevistaban a una joven socióloga israelí que resumía las conclusiones de un estudio que había realizado en los últimos años, dando voz a muchas madres silenciadas.
Las reacciones (decenas de artículos, críticas descomunales en los comentarios, tertulias televisivas) desembocaron en un verdadero trending topic que está llegando como una ola a todos los países de Europa.
Bajo el lema #regretttingmotherhood, #madresarrepentidas, los medios y redes sociales alemanes se han inundado de madres que condenan ese tipo de declaraciones, pero también de voces de muchas otras madres que dicen haberse sentido aliviadas al saber que no están solas. Les reconforta el simple hecho de poder expresar su desdicha, poder poner en palabras los sentimientos acallados por miedo a la crítica severa de la sociedad.
Orna Donath (1976) es socióloga investigado ra en la Universidad Ben Gurion del Néguev, en Beersheba. Su especialidad son las expectativas sociales que se proyectan sobre las mujeres, tanto las que son madres como las que no lo son. Tras Making a Choice (2011), su primer estudio sobre las mujeres judías de Israel que no querían tener hijos, llega Madres arrepentidas (2016), su primera publicación de alcance internacional.
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