En 1974, la humanidad envió desde el radiotelescopio de Arecibo su primer mensaje por radio destinado a las posibles inteligencias extraterrestres del universo. Una avanzada civilización capta el mensaje, y envía a uno de los suyos en misión de reconocimiento a la Tierra. Pero durante el viaje se tropezará con personajes de las más variopintas razas extraterrestres que complicarán y retrasarán su tarea, con consecuencias tan inesperadas como desastrosas.
Infiltrado reticular, pese a ser un libro que toma su título de un patrón de imagen radiográfico que puede aparecer ante algunas patologías pulmonares, es una novela de ciencia ficción con un marcado componente de humor. Protagonizada por un alienígena boreliano que no revela su nombre en ninguna de las páginas de la novela, Infiltrado reticular nos traerá una historia interesante y original que nos cautivará desde sus inicios.
Como acabamos de comentar, el humor es uno de los pilares de la novela. Además de las situaciones hilarantes muy bien hilvanadas unas con otras, el estilo de
Germán Fernández en esta novela está tan comprometido con el humor que a lo largo de la narración se ríe incluso de sí mismo, por ejemplo, realizando continuas aclaraciones jocosas al lector en relación con la extraña terminología extraterrestre y sus términos “equivalentes” para los terrícolas o poniendo nombres absurdos a personajes o lugares de la narración, como son la cárcel de Alq-al-Hammeko o la enfermera Kondede Montegrís (que, sí, intenta escaparse de dicha cárcel haciéndose pasar por el cadáver de otro recluso).
A su vez, en Infiltrado reticular,
Germán Fernández crea varias nuevas civilizaciones, con sus nuevas tecnologías, su sociedad… lo cual da lugar a personajes muy variados y a los que poco a poco iremos conociendo y queriendo. Cada uno de ellos aportará su grano de arena a la trama, la cual nos llevará por centros comerciales, cárceles, juzgados (aquí aprovecho para destacar que el juicio en el que se ven envueltos los protagonistas de la novela es absolutamente genial) y planetas a lo largo del universo.
En definitiva,
Infiltrado reticular es una novela de ciencia ficción que provocará risas allá por donde pase y que desde aquí les recomiendo.
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